La Piscinita San Andrés
Colombia

Un mes recorriendo Colombia

el
11/11/2019

Colombia, nuestro gran destino siempre pospuesto.

Pasaron varios viajes y al fin decidimos ir a Colombia. Nos armamos un recorrido “caribeño” con mucho mar, mucha playa, selva y poca ciudad. No queríamos tránsito, ni aglomeración de gente, tampoco pretendíamos mucho lujo, andábamos en busca de un poco de sencillez sin que esto se mal entienda.

Información útil para visitar Colombia durante un mes.

Primera parada: Cartagena de Indias.

Llegamos a Cartagena de Indias en donde nos esperaban en el Barahona 446. Hotel situado en Bocagrande y realmente nos sorprendió la zona y sobretodo el hotel.

No es de las grandes cadenas hoteleras de Colombia y superó ampliamente nuestras expectativas. Cuenta con una piscina, habitaciones con aire acondicionado (fundamental) el desayuno exclusivo de su restaurante Cilantro. Además, la atención de su gente, que dicho sea de paso, nos fuimos con varios amigos con los que aún seguimos en contacto.

Los primeros 2 días fueron aclimatarse al lugar, a sentir estar de viaje. Cartagena fue ese comienzo que esperamos a dónde íbamos a finalizar nuestro viaje por Colombia.

Segunda parada: Isla de Providencia, Colombia

De ahí, y haciéndole caso a una amiga que nos “obligó”, nos fuimos a Providencia. Isla a la cual llegamos haciendo una escala en isla de San Andrés.

Acá queremos remarcar que organizamos el viaje para hacer la escala de 5hs en donde el aeropuerto está a 1 cuadra de la playa. Por lejos, un paraíso al cual consideramos nuestra mejor escala de toda la vida. 

La “islita” nos esperaba con 30° de mínima. Siempre. Aterrizamos a las 17hs y nos fuimos a lo de Ferma, una eco posada en la zona de Casas Bajas, a 1 km de Manzanillo. Para nosotros la mejor playa de la isla, y de varias playas que ya conocemos por el mundo.

Dejamos las mochilas y decidimos ir a tomar unos tragos a la playa al Miss Julia, restaurante-parador también de Ferma y Genaro que con tanto amor y dedicación atienden. Fue tal el encanto que nos regaló la isla obligándose a no querer irnos así que elegimos seguir ahí, eso sí, lamentando tener que dejar la hospitalidad del Manchineel Road, la posada de Ferma por tener las habitaciones reservadas.

Buscando, conocimos a Marcos Robinson y su eco posada recién estrenada en donde tiene unas habitaciones hermosas y súper amplias con vista al mar, que al momento del desayuno, creemos, que es cuando más se disfruta. El barrio es San Felipe, el cual está a 1km de Fresh Water, lugar con una bella bahía que se asemeja a una pileta, no hay olas, no hay viento, hay sol y palmeras. Un restaurante en la playa que, como en toda la isla, prestan las sillas y reposeras sin ningún interés, y frente a un almacén de los más grandes de la isla.

Providencia nos encantó. Así de simple. Su gente, su ruta, su playa, su naturaleza, su amor por cuidar lo que tienen. Vivimos 7 días de los más lindos. Esta isla escaló bien alto en nuestros preferidos viajeros. 

Tercera parada: Isla de San Andrés

Dejando atrás Providencia, Volvimos a la “vedette” de las islas, la que todos conocen. Isla de San Andrés nos esperaba con su vasta oferta turística, tours, excursiones, cantidad infinita de perfumerías, casa de deportes, restaurantes, boliches, en fin, una amplia variedad para el visitante. En la zona del centro teníamos reserva en los Apartamentos Turísticos Titanic, lugar que nos pareció ideal al no estar en pleno centro, pero sí muy cerca de él. Con restaurantes, bares y almacenes muy cerca, es cómodo si uno necesita un poco de tranquilidad.

Para recorrer la isla es indispensable rentar una moto o una “mula” (carritos de golf). Nosotros lo hicimos con Eliu (@alquiler_moto_sanandres) quién tiene motos Yamaha 0km que sabes que nunca fallan (y este es un dato importante, para no arruinarse el día de recorrida). Además, de las motos, ofrece cursos de Kite Surf dados por instructores experimentados en la Bahía Rocky Cay, Av, San Luis.

Cuarta parada: Parque Nacional Tayrona, Colombia

Dejando atrás con bastante tristeza las islas y sus playas paradisíacas, volvimos al continente para irnos al mítico Parque Nacional Tayrona, tan natural, tan selvático.

Desde la isla tomamos el avión hasta Cartagena de Indias y directo desde el aeropuerto nos fuimos a la terminal de combis Marsol (también está la empresa Berlina) que nos llevó a Taganga, el pueblito vecino más cercano al Parque Tayrona en donde hicimos base dejando la mayor parte del equipaje en el hostel (casi todos los hospedajes brindan ese servicio de guarda equipaje).

Después de una noche de stop, nos levantamos y nos fuimos al parque, con lo mínimo de equipaje. Para ir desde Taganga hay que llegar al Mercado de Santa Marta en donde salen combis que demoran 1 hs en llegar a la entrada del parque.

Para ingresar al parque hay dos opciones, comprar las entradas y el seguro obligatorio por internet o adquirirlas en la puerta. La primera opción es la mejor si se sabe con exactitud la fecha de visita ya que te evitas las filas, que en temporada alta, son interminables. El seguro se puede adquirir mismo comprando la entrada o unos puestos que hay sobre la ruta. También ofrecen el hospedaje para dentro del parque, en cualquiera de sus campings. Las alternativas son carpa con colchón 40.000 COP p/p o hamacas 35.000 COP p/p siendo el Camping de Cabo San juan el más costoso, quizá por la exclusiva ubicación sobre el mar o por ser el más conocido.

Quinta parada: Minca

Luego de nuestra visita al Tayrona, volvimos a Taganga para hacer noche y al otro día volver a irnos, ya con todo nuestro equipaje. Nuestro próximo destino fue Minca, en donde sus redes y hamacas al precipicio la vuelven intrigante. Desde Taganga tardamos 1hs y, también tuvimos que ir al mercado de Santa Marta para conseguir combi. El transporte cuesta lo mismo que para llegar al Tayrona (8.000 COP). 

Ya en Minca hay 2 formas de llegar a los hospedajes que están en la selva montañosa, en Jeep que tiene un valor de 180000 COP y van 5 personas, o en moto con un valor de 20000 COP.

Obviamente nosotros elegimos la moto y en el camino, decidimos alquilar una de ellas (La moto de Jesús +54 (304) 574-8866) por 120000 COP por dia y asi poder recorrer con nuestra libertad toda la zona. Fue lo que hicimos, aunque hay que destacar que el camino es extremadamente complicado para alguien que no esté acostumbrado. Desde nuestro hospedaje estábamos a 15 minutos del lugar más cercano o 3:30hs para dar la vuelta a la montaña.

Y no se mide por km, sino por minutos ya que, como les comentaba, el camino es complejo y hace que no se pueda ir mucho más rápido de 20 o 30 km/h. Visitamos fincas de café, miradores 360° cervecerías artesanales, cascadas, entre lo mas lindo. Nuestra estadía fue de 3 días, lo cual creemos que estuvo bien.

Cerrando nuestro gran viaje, desde Minca teníamos que volver a Cartagena y disfrutar los últimos 2 días.

Parada final: Cartagena de Indias

Para eso, nuevamente llegamos a Santa Marta pero esta vez, no fuimos al mercado, sino que nos acercó la combi hasta una oficina de la empresa Berlina la cual también une Cartagena con Santa Marta. El viaje demoró unas 5 hs en total para llegar hasta el Barahona 446, nuestro hotel en Cartagena .

Cartagena fue el cierre ideal de nuestro viaje, disfrutamos la ciudad a pleno. Hicimos playa, ciudad amurallada de noche, compramos regalos para amigos y familia y caminamos bastante por Bocagrande en donde está situado el hotel.

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FLORENCIA & CHRISTIAN
Buenos Aires, Argentina

¡Hola viajeros! Somos Flor y Chris, Argentinos, viajeros, cumplidores de sueños. Comenzamos viajando la primera vez en forma de vacaciones a Ecuador, para descubrir no sólo nuestro primer país, sino nuestras ganas de visitar más países y aprender de su gente y su historia. Nos encanta viajar, conocimos más de 30 países y más de 100 ciudades entre los 5 continentes. Literalmente, cumplimos el sueño de dar la vuelta al mundo. Intentamos mostrar el mundo con nuestros ojos tratando de inspirar a aquel que aún no se animó a viajar.